Un día al ir a cruzar la calzada de mi calle, vi una lata de cerveza de la marca Voll-Damm completamente chafa. Supuestamente, alguien la habría tirado, y el paso de los coches sobre ella la había dejado completamente plana. No dudé en cogerla y llevármela a casa, pensando que algún día ya se me ocurriría qué hacer con ella.
No sólo disfruté mientras pintaba esta serie de cuadros, también lo hice cuando los creaba. Algunos de ellos, los pinté tal y como los iba fotografiando en el mismo lugar en donde me encontraba las latas, pero en otros como éste, tuve que pensar e idear qué hacer con ella.
Así que un día la cogí me fui a una zona cercana a mi casa en la que estuviese tranquila y solitaria, y me puse a buscar algún lugar idóneo para poder reflejar el porqué de su forma. Y, esto es lo que se me ocurrió.
¿Sabíais qué la Voll-Damm se creó en el año 1953? Su nombre se compone de la partícula voll, que en alemán quiere decir lleno y completo, con ello se referían a su cuerpo y sabor. En un principio solamente se producía en verano, pero en el año 1955, debido a su buena acogida, Damm decidió producirla durante todo el año.
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